Antiguo edificio del Horno
En el pueblo existía otro edificio muy significativo, que en la actualidad también ha sido renovado, era el Horno.
Era un horno público cuyo uso se subastaba el día de año nuevo por el mayor valor. Las familias presentaban ofertas de
forma conjunta y el grupo que se quedaba con él repartía el uso del mismo cada ocho días. La gente amasaba y preparaba
pan y bollos para que el vecino encargado horneara todos a la vez. La persona encargada del horno obtenía un pan de
las horneadas de cada familia.
Con el uso del local se acordaba que el día de San Antonio, 13 de junio, todos los horneros
prepararan huevos cocidos y panecillos para repartir entre cada familia del pueblo en la fiesta que se celebraba y que
acompañaban con música y vino. Ese mismo día el Ayuntamiento realizaba la subasta de las andas del Santo y otros
alimentos para recaudar dinero que después se invertía en las necesidades de la localidad.
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